RobertoMasajistA Sobador

El masaje apoya nuestros recursos para hacer frente a las jornadas de trabajo y presiones cotidianas. Para la gran mayoría de nosotros, la rigidez y el dolor son una forma de vida a la que nos hemos habituado, y con frecuencia no nos damos cuenta que nuestros músculos están tensos hasta que duelen y limitan nuestros movimientos. El estrés se define como la suma de reacciones biológicas a cualquier estimulo físico, mental, o emoción adverso, interno o externo, que tiende a acelerar el metabolismo del organismo. En una primera etapa, se produce tensión, el cuerpo se tensa al prepararse para la acción, sea esta agresión o huida. Glándulas especializadas liberan hormonas que incrementan los ritmos cardiaco y respiratorio, elevan la glucosa en sangre, aumentan la transpiración, dilatan las pupilas y hacen más lenta la digestión. En una segunda etapa, se produce la relajación, donde el cuerpo libera la tensión y se prepara para reparar cualquier de daño causado por la tensión y reponer sus energías. Si estamos sometidos a estrés por un período largo, el cuerpo se mantiene en situación de alerta (alarma) y no se puede relajar para repararse. Si continúa la tensión se inicia una tercera etapa, el agotamiento; cuya consecuencia puede ser una alteración como micro-desgarros, desgarros, contractura, espasmo o micro-fracturas.