Mi trabajo integra las prácticas basadas en la evidencia de la psicología profunda y la terapia de compromiso de aceptación, y también se basa en mi experiencia en psicología espiritual y mi formación en consejería en adicción. Disfruto trabajando con personas, parejas y familias que luchan con los desafíos de las relaciones interpersonales y las realidades de la vida cotidianas ya menudo abrumadoras. Creo que el bienestar óptimo implica poder responder a los desafíos de la vida con amabilidad, aceptación y una mentalidad de crecimiento.