Consejos para evitar estas estafas que están dirigidas especialmente a los jóvenes
Redacción EC
Para ayudar a padres y jóvenes a proteger sus finanzas, Chase comparte las estafas más comunes en este regreso a clases y consejos para evitarlas:
Robo de identidad estudiantil: Los estafadores acceden a bases de datos escolares para obtener información de los estudiantes y enviar correos electrónicos de suplantación (phishing), haciéndose pasar por instituciones educativas y convencerlos de entregar datos personales o claves de acceso.
Consejos:
• Evita realizar trámites personales en redes Wi-Fi públicas, como en cafeterías o bibliotecas.
• Guarda documentos importantes en un lugar seguro. Si pierdes alguno, o crees que fue robado, repórtalo de inmediato.
• Activa la facturación electrónica (sin papel) para tus tarjetas, préstamos y cuentas bancarias.
Estafas de becas y ayuda financiera: Cada año, los estafadores hacen perder cientos de millones de dólares a estudiantes al hacerse pasar por representantes de instituciones, bancos o agencias, ofreciendo becas o préstamos falsos, y pidiendo “verificar” información personal.
Consejos:
• Ignora y bloquea llamadas o mensajes de números desconocidos. Si tienes dudas, cuelga y comunícate directamente con la institución o el banco.
• Protege toda la información relacionada con tus préstamos estudiantiles y utiliza herramientas digitales para monitorear de cerca tus cuentas financieras y bancarias.
Estafas de alquiler de libros y artículos escolares: Los estafadores crean tiendas en línea falsas ofreciendo útiles escolares y alquiler de libros “con descuento”, pero entregan productos de mala calidad o simplemente son inexistentes.
Consejos:
• Verifica que los libros y útiles usados sean válidos, especialmente si requieren códigos o credenciales únicos.
• Cuidado con correos sospechosos. Compra solo en tiendas oficiales y evita responder correos o mensajes no solicitados. Antes de comprar, busca el nombre del sitio junto a palabras como “estafa” o “quejas”.
Estafas de alquiler de habitaciones (roommate scams): Los estafadores publican anuncios falsos, se hacen pasar por propietarios y cobran renta por adelantado. El día de la mudanza, la víctima descubre que la habitación no existe o ya está ocupada.
Consejo:
• Asegúrate de que la vivienda exista antes de realizar cualquier transacción. No envíes dinero a desconocidos ni compartas datos personales. EC