Por fin, después de haber buscado trabajos para obreros con buenos salarios, enviado tu currículum a varios lugares, de haber enviado innumerables correos electrónicos y haber completado solicitudes, has sido recompensado con una entrevista de trabajo. Esta es tu oportunidad de conseguir el trabajo de obrero que deseas. 

Ahora solo falta que tengas éxito en esta etapa. Hay tres factores clave que están bajo tu control que aumentarán tus probabilidades de conseguir el trabajo.

1. Cómo lucir

Tu ropa dice mucho de ti. Desde el momento en que entras por la puerta, la ropa que vistes comunica tu criterio, el valor que le das al trabajo, el respeto que tienes por la empresa y si podrías ser o no una buena persona para el trabajo. Hace esto incluso antes de que hayas dicho una palabra, así que asegúrate de que tu vestimenta diga lo que quieres.

Lo primero que mucha gente pregunta es: “¿Debería usar traje?” ¡Buena pregunta! La respuesta depende del tipo de trabajo que estés solicitando. La vestimenta formal o de negocios suele ser la mejor para los trabajos administrativos en entornos de oficina, pero para los trabajos manuales o de obrero, puedes usar unos jeans oscuros nuevos y una camisa o blusa con cuello para transmitir tu seriedad y profesionalismo. 

Aquí hay algunas otras pautas de apariencia a seguir:

• No te vistas provocativamente. La ropa ajustada o mostrar demasiada piel es un no-no.

• No uses ropa con lemas, dichos divertidos, mensajes políticos o obras de arte que distraigan.

• No es necesario que tu ropa sea cara, solo que esté limpia y en buen estado.

2. Cómo actuar

La forma en que te comportas dice mucho sobre el tipo de empleado que serás. ¿Tienes confianza y eres responsable, o estás cauteloso y a la defensiva? ¿Es agradable estar cerca de ti? Todo esto y más se puede transmitir simplemente estando de pie, moviéndose y actuando.

Por otro lado, asegúrate de llegar entre 10 y 15 minutos antes y ser cortés con el personal. Mantén tu teléfono en silencio y no respondas ni hagas llamadas. No te inquietes ni interactúes demasiado con los demás candidatos al puesto.

Mantén una buena postura, ya sea de pie o sentado, y cuando el entrevistador te salude, haz contacto visual, sonríe y ofrécele un apretón de manos firme.

En la entrevista, espera hasta que te ofrezcan una silla antes de sentarte. Cuando lo hagan, siéntate frente al entrevistador e inclínate ligeramente hacia adelante para transmitir tu interés. Del mismo modo, no cruces los brazos sobre el pecho, ya que esto parecerá una actitud defensiva. Mantén las manos cruzadas sobre tu regazo.

Al final de la entrevista, agradece al entrevistador por su tiempo, sonríe y vuelve a estrecharle la mano. 

3. Cómo hablar

Lo que digas en una entrevista es el factor decisivo de lo que escucharás al final. Estos consejos te ayudarán a asegurarte de decir (y escuchar) lo correcto:

• Habla sobre tu educación y cualquier capacitación especializada o programas de certificación que hayas hecho relacionados con el trabajo.

• Habla sobre tu experiencia laboral.

• Habla sobre logros como premios, registros de asistencia u otras cosas que demuestren tu carácter.

• Haz preguntas si te lo piden: investiga el sitio web de la empresa y la descripción del puesto antes de la entrevista para prepararte. 

• No preguntes sobre el salario o los beneficios; es mejor dejar ese tema hasta que haya una oferta de trabajo sobre la mesa.

• No hable sobre raza, religión, orientación sexual, edad, ciudadanía o creencias políticas con el gerente de contratación.

• No digas palabrotas, no uses jerga, ni cuentes chistes.

• No haga comentarios negativos sobre trabajos anteriores, antiguos empleadores o compañeros de trabajo.

• No seas demasiado familiar ni casual.

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